jueves, 25 de abril de 2013

AMBIENTE DE ESTUDIO

Aquí vamos a exponer de manera concisa algunas factores que favorecen que nuestros hijos e hijas estudien  con éxito. Debemos supervisar estos para favorecer el esfuerzo que están realizando.

1.- Factores personales:

 Adecuada alimentación. Es muy importante que los niños/as realicen un desayuno completo y equilibrado.

Períodos de descanso y sueño suficiente.

Ejercicio físico o cualquier actividad que permita descarga tensional.

Hacer descansos cada 15 minutos.

No olvidar los momentos de juego con los adultos y otros niños/as.


 2.- Factores ambientales:
 
El lugar para el estudio debe tenre las siguientes características:
- Que sea siempre el mismo.
- Aislado del ruido exterior.
- Ordenado, con todo lo necesario a mano (lápices, cuadernos, diccionarios, libros de consulta…)
Iluminado, ventilado, con temperatura adecuada.
- La silla no debe ser excesivamente blanda y debe permitir que los pies lleguen al suelo teniendo las piernas un ángulo de 90 grados, la mesa debe tener la altura adecuada (la del estómago estando sentado).
- A la hora de la tarea, apague la televisión y evite cualquier tipo de distracción y/o interrupciones.

3.- Factores de planificación y uso de técnicas de trabajo intelectual.


a· Con respecto a la planificación del estudio en el Primer y Segundo Ciclo de Educación Primaria.

 Conseguir que el niño estudie aprox. media hora en casa, si desea dedicarle más tiempo no existe contraindicación, con tal que dedique el tiempo suficiente para realizar actividades de ocio.

Para adquirir el hábito de trabajo en casa, en esta edad, el niño va a necesitar de la ayuda de los padres porque él sólo no va a poder ni saber ni querer generalmente.
 

QUÉ TRABAJAR CON NIÑOS Y NIÑAS EN EL PRIMER CICLO DE E.P.

 · En primer lugar lo que aconsejen los profesores/as.
 
· Revisar lo que ese día han hecho en clase, reforzando lo que han hecho bien (preguntarles, posibilitar que el niño/a explique lo que ha aprendido, ponerle otros ejemplos parecidos,…).

· Leer unos minutos lo mejor posible, dialogando sobre lo que leen. Si aún no domina la lectura, reforzar su aprendizaje siguiendo las indicaciones de los profesores/as.Lo que se pretende en este ciclo es que al niño le guste leer, que se interese por la lectura.

 · Dedicar unos breves minutos al cálculo, adaptado a su conocimiento y nivel.

 · Se debe potenciar en los niños la técnica de LA ESCUCHA.



QUÉ TRABAJAR CON NIÑOS Y NIÑAS EN EL SEGUNDO CICLO DE E.P.
· En primer lugar lo que aconsejen los profesores.
· Revisar lo que ese día han hecho en clase, reforzando lo que han hecho bien.
· Leer unos minutos, con la entonación y ritmos adecuados, entendiendo lo que lee y escribe, consultando el diccionario en las palabras que no entienda, la lectura tiene que ser ya más larga que en el ciclo anterior. Lo que se pretende en este ciclo es que el niño /a vaya adquiriendo el hábito lector. Después de la lectura podemos solicitarle que nos cuente qué ha leído y le hacemos preguntas en torno a la lectura.
· Escribir con letra clara y sin errores.
 · Dedicar unos breves minutos al cálculo, adaptado a su conocimiento y nivel (sumas, restas multiplicaciones). 
· Repasar con ellos el tema para comprobar si lo han entendido bien.
 · Fomentar la comprensión frente a la memorización mecánica. Para ello, una vez que hemos repasado el tema con ellos, deberán realizar un mapa conceptual o esquema del tema y seguidamente decirlo en voz alta para comprobar que lo han entendido.
 · Técnicas adecuadas: Diagramas, esquemas, subrayado y resumen.
 


 

domingo, 10 de marzo de 2013

HIGIENE DE NIÑOS EN EDAD ESCOLAR



1.- ¿Por qué es importante la higiene de niños en edad escolar?


Uno de los principales papeles de los padres es facilitar al niño el aprendizaje de todos los hábitos básicos de autonomía como son la higiene diaria y el cuidado personal.

La higiene es una parte fundamental en nuestras vidas ya que a partir de ella se previenen enfermedades y se crean buenos hábitos de salud. Asimismo, favorece entre los niños su adaptación social ya que en los primeros años de vida escolar los grupos de amistades se comienzan a formar selectivamente.
Los hábitos de higiene también lo ayudan a conocer su cuerpo y brindarle una sensación de seguridad e independencia.

2.- ¿Cuáles son las medidas de higiene a ser adoptadas en la edad escolar?

Un niño siempre entenderá más de lo que puede expresar aunque creamos que no comprende, por lo que hay que introducirlo en los hábitos de higiene tan pronto como sea posible. En los niños pequeños las rutinas diarias como cambiarle el pañal, limpiarlo al comer o bañarlo les hace aprender que son hábitos indispensables.

Aún así es en la edad escolar cuando la adquisición de los hábitos toma la mayor relevancia. A esta edad ya deberían estar habituados, pero aún así es importante recordarles la importancia de los hábitos higiénicos.

Una manera de inculcar hábitos es describir al niño de acuerdo a su nivel de desarrollo todas las acciones y los beneficios que le aporta el aseo diario, como sería el sentirse limpio, oler y verse bien.

También es importante la comunicación no verbal entre padres e hijos, enseñarles con buen humor y de manera relajada hará que disfrute de estos momentos y no se conviertan en un suplicio.

La constancia y el ejemplo de los mayores también ayudan, ya que los niños aprenden por imitación de los modelos que tienen a su alrededor.
Dos cosas a tomar en cuenta:

Hay que evitar la obsesión por la limpieza
Hay que enseñarlos a lavarse de manera adecuada.
3.- Aquí os proponemos algunas páginas webs y blogs que os ilustrarán en ello.
 
 
  Presentaciación didáctica que destaca los aspectos relacionados con la higiene personal.
 


miércoles, 6 de marzo de 2013

LOS CELOS INFANTILES


                                   LOS CELOS EN LOS NIÑOS

 
Los celos son sentimientos de envidia y resentimiento hacía otra persona que se supone obligada a prestarnos atención y no lo hace. En la familia, la rivalidad entre los hermanos por conseguir el afecto y la atención de los padres suele ser el principal y primer motivo de celos. Los celos son un estadio relativamente normal que hay que superar, hemos de prestarle atención cuando alteren la convivencia y el desarrollo normal del niño o sean persistentes y no remitan pasados los cinco años de edad.

 
CAUSAS DE LOS CELOS

 
Existen distintas situaciones que pueden provocar en el niño el temor a perder el afecto de los padres o el sentimiento de haberlo ya perdido. Cabe destacar:
 

- El nacimiento de un hermano: el recién nacido requiere una serie de cuidados y atención que hace perder al mayor parte de la que se le dedicaba a él; la conducta de la madre hacía los hijos cambia durante y después del embarazo, puede aparecer impaciente o fácil de enfadarse, estos cambios están asociados a la gestación y el niño hace responsable de ellos al bebé.
 

- Los favoritismos y preferencias de los padres: a veces abierta y otras solapadamente los padres manifiestan preferencias por uno de los hijos, lo que crea celos en los otros. Puede existir una situación especial que se crea entre dos hermanos cuando alguno de ellos presenta algún tipo de deficiencia, sobre todo física, con lo que acapara la atención y protección de los padres.

 -La excesiva dependencia o necesidad de uno de los padres por parte del niño: normalmente de la madre, lo que desencadena celos hacia al otro progenitor por considerarle rival.

 -El sentimiento de inseguridad y de inadaptación: el niño o la persona insegura frecuentemente envidia a los demás; estos sentimientos suelen ser el resultado de situaciones de ridículo en la infancia, de sentirse rechazado o bien criticado de forma severa. El alentar la competencia entre los hermanos favorece la presencia de los celos.

No le es fácil al niño compartir a su madre ni con el padre ni con el hermano, pero con éste último le es más difícil porque es más parecido a él.

 
EL PRIMOGENITO ANTE EL NACIMIENTO DE UN HERMANO

 Cómo ayudarle a adaptarse a un nuevo bebé
 

Disminuir enfrentamientos madre-primogénito antes del nacimiento del nuevo bebe.
- Preparar con mucha anticipación los nuevos cambios en la vida del primogénito, que estos no coincidan con el nacimiento: ingresos o cambios de guardería, cambios de habitación, nuevos aprendizajes como por ejemplo aprender a no usar el chupete… Es mejor que comience a ir a la escuela infantil uno o dos meses antes que justo cuando nace el hermano.
-Evitar comentarios de fatiga o agobio con el nuevo bebe o respecto a los otros hijos.
-Dar atención extra con tiempos específicos dedicados al hijo mayor (el padre o la madre aunque conviene que también lo haga la madre).
-Aceptar con tranquilidad y como algo normal los celos y la inquietud. Proteger al bebe pero procurando no enfadarse con el hermano ni prestar excesiva atención. “Los celos suelen durar máximo 8 meses”. Esperar menos autocontrol cuando nace el hermano y no enfadarse.
-Enfatizar la individualidad de cada persona y animarle a jugar o a ayudar al nuevo hermano. Al inicio la ayuda es a la madre o al padre en actividades con el bebe: alcanzar los pañales, etc.
-A veces puede ser de ayuda regalar al hermano mayor un muñeco al que debe cuidar junto con los utensilios de aseo y alimentación propios de un bebe.
-Animar al niño a tener relaciones cercanas con abuelos, tíos, amigos  y que se sienta querido y protegido en su ambiente.
 
 
 
COMO AYUDARLES

 

1.-Preparar al niño para la llegada de un hermano

La preparación ayuda al niño aunque no por ello se evitan los celos. Aunque el niño/a lo comprenda todo racionalmente se puede sentir abrumado emocionalmente.

Lo fundamental para la preparación es que el niño comprende que se le va a seguir queriendo. No adelantaremos acontecimientos diciéndole que jugará con su hermanito ya que aún tendrán que pasar muchos meses para que esto ocurra.

Durante el embarazo, sobre todo si los niños tienen entre 4 y 6 años, harán muchas preguntas sobre temas sexuales y de reproducción es un buen  momento para comenzar una buena educación sexual

 

2.-Intentar cambiar lo menos posible la rutina del niño tras el nacimiento del hermano.

En distintos estudios se ha comprobado que disminuye considerablemente el volumen de atención que recibe el primogénito al tiempo que cambia su rutina tras el nacimiento. Esto afecta mucho al niño/a, por lo tanto  procurar controlar su tiempo especial, los ritos para acostarse, seguir diciéndole lo mismo sobre lo que está permitido y lo que no...

 

3.-Mantened al niño/a aislado de la madre el menor tiempo posible.

Mientras que la madre da a luz muchas veces se envía al niño con otros familiares .Lo mejor es que se ocupa el padre y si no puede que este alejado de la madre el menor tiempo posible. Incluso es conveniente que visite a su madre en la clínica, buscando un momento tranquilo en el que esté sólo la familia.

 

4.-Hablar de "igual a igual" con el primogénito

la rivalidad suele disminuir cuando la madre habla con el primogénito de igual a igual respecto al bebé. Comentar lo que el bebé puede sentir o necesitar llamar la atención del niño ante el interés del bebé por él, hacia lo que le gusta y lo que no...

 

Algunos Ejemplos: "A ella le gusta mirarte","¿Se habrá enfadado por despertarle? "no sonreirá si le gritas porque le asusta un poco" "Escucha a la pequeña Adela, quiere su biberón" podemos preguntar al niño lo que cree que quiere o siente el bebé.

 

5.-No hacer comparaciones

 

6.-Prestar atención al mayor y hacer que lo hagan los demás

Dedicad al día un tiempo exclusivo para el niño, de 10 1 5 minutos. El niño puede esperar este tiempo y confiar en él.

 

7.-Nunca alejad al mayor por el nacimiento de un hermano

Muchas veces para tener más tiempo para atender al pequeño enviamos al hermano a una guardería o lo confiamos durante un tiempo a otras personas, hemos de evitar esto ya que la amenaza de abandono se concreta y da lugar a perturbaciones en su comportamiento o a sentimientos dolorosos.

 

8.-No "pasarle" todo al pequeño

Muchas veces el pequeño se aprovecha. Puede molestar al mayor destruyendo sus realizaciones y este reaccionar con violencia. No reprender muy fuertemente al mayor no consolar mimosamente al pequeño, reñir al pequeño suavemente para que sea más cuidadoso y ayudar al mayor a rehacer su construcción.

 

 

Diez consejos para evitar los celos ante la llegada de un hermano (no están en orden de importancia):

 
  1. Dependiendo de la edad de tu hijo, debes decidir cuándo contarle que estás embarazada y que llegará un nuevo bebé. Los más pequeños (1 a 3 años) no entenderán mucho si les cuentas sobre el bebé a comienzos del embarazo. En la medida que tu cuerpo cambie, probablemente alrededor del quinto o sexto mes, tendrás evidencia concreta de que hay un bebé, lo que lo hará más fácil de comprender. Sin embargo, para este grupo de edad, el niño no entenderá realmente lo que sucede hasta que el bebé llegue a casa contigo.
  2. Antes que nazca tu bebé, prepara a tu hijo dándole una muñeca que parezca un bebé para que la cuide. Usa tu imaginación y dale la oportunidad de que juegue con el bebé "de mentira", cambiándole el pañal, alimentándolo, recostando la muñeca para que se duerma, vistiéndola y siendo muy suave con el bebé.
  3. Compra libros que hablen de hermanos y un bebé nuevo. Por ejemplo, la serie de los osos Berenstein tiene un libro dedicado a un nuevo bebé. En español hay tres libros recomendables de Mercer Mayer: La Hermanita de Franklin, La Nueva Hermanita de Francisca y El Nuevo Bebé.
  4. Es importante explicarle a tu hijo qué sucederá cuando llegue el momento de dar a luz, por ejemplo, por qué la abuelita se quedará cuidándolo o decirle que lo llevarás a la casa de su tía mientras mamá va al hospital. O puedes explicarle que papá o el abuelo lo pasarán a buscar a la escuela. Los niños necesitan que les den seguridad y que les reafirmen que hay un plan; es decir, que alguien los va a cuidar mientras mamá está teniendo al bebé. Si el niño podrá ir al hospital o centro de maternidad es importante decirle. Si sus rutinas van a cambiar, hay que preparar al niño. Los niños pueden manejar los cambios siempre y cuando estén preparados.
  5. Si das a luz a tu segundo hijo en el mismo momento en que estás tratando de enseñarle al mayor a que deje de usar pañales, o cambiándolo de la cuna a una "cama de grandes", o tratando de quitarle el biberón o el chupete, ¡piénsalo dos veces antes de hacerlo! Es muy difícil esperar que un niño pequeño progrese al siguiente nivel de desarrollo al mismo tiempo que aparece un nuevo bebé en el panorama. En verdad, podrás hallar que tu pequeñín incluso retrocede un poco cuando el bebé nace. Ciertos hitos que te habían costado mucho lograr, como que duerma de corrido toda la noche o que use la bacenica pueden desaparecer momentáneamente cuando llegue el nuevo hermanito. Trata de ser consistente
  6. con tus expectativas, ¡pero no seas muy estricta con tu hijo! Recuerda cuánto ha cambiado su vida (sin que sea su culpa) con la llegada del bebé.
  7. Dicho eso, es muy importante tratar de mantener las rutinas del hijo mayor, a pesar de lo impresionantemente demandante que resulta tener un nuevo bebé en casa. Los grupos de juego, clases, escuela, comidas, hora del baño y la hora de ir a la cama generalmente funcionan en un determinado horario. Trata de mantener, dentro de lo que te sea posible, el programa habitual. Esto le demuestra a tu hijo que a pesar de la disrupción (tanto positiva como negativa), valoras su vida y sus intereses, además de su lugar dentro de tu familia.
  8. Permite a tu hijo mayor tomar un rol activo en la vida del bebé. Por supuesto que hay que enfatizar que sea "suave con el bebé". Pero también es importante integrar al bebé a la vida familiar, lo que ayuda a crear una relación positiva entre el niño y el bebé. Descubrirás que tu bebé pueda responder mejor a su hermano o hermana que a los demás. Deja que tu hijo mayor ayude con la alimentación, el baño u otros cuidados del bebé. Muchas veces cuando no se logra calmar al bebé usando métodos tradicionales, los hermanos mayores (haciendo muecas, cantando o haciendo shows) sí lo consiguen.
  9. Cuando llega un nuevo bebé al hogar, tu hijo se va a sentir desplazado. No hay manera de evitarlo. Los bebés son muy demandantes y los niños se vuelven más demandantes todavía cuando nace el bebé. Es importante hallar momentos en que puedas estar a solas con tu hijo mayor, momentos en tu día o semana que tu hijo sienta que te tiene para él solito. Es fundamental que el niño tenga un momento especial con su madre, ya sea aprovechando la rutina de leer cuentos por media hora antes de irse a dormir o ir a la plaza a jugar sin el bebé.
  10. A veces los niños desplazados por un nuevo bebé cambian su comportamiento. Pueden tener pataletas sin ninguna razón obvia. Pueden molestar al bebé, pareciendo en un principio ser cariñosos pero en realidad siendo agresivos. Es importante colocar límites al comportamiento del hermano mayor si sientes que está actuando de manera inapropiada o peligrosa. Utiliza palabras que dejen saber al niño que sabes que es difícil tener un bebé en casa, que las cosas han cambiado y que ya no podrá siempre salirse con la suya (como quizás lograba en el pasado). Sin embargo, ¡también es importante ser claro con el niño en sentido de que este bebé no se va a ir! Es decir, necesitas conversar con tu hijo sobre cómo ha cambiado la familia (para mejor y para peor) y que aunque tenga pataletas, el bebé siempre estará allí. Es importante ser sincera sobre las cosas difíciles, pero también sobre las cosas maravillosas que implica tener un hermanito.

 

Finalmente, para la mamá de dos o más niños: piensa en tu propia niñez. ¿En qué lugar naciste? ¿Eres la menor o el hijo del medio? ¿La mayor? ¿Te acuerdas de cuando nacieron tus hermanos o cómo te trataban tus hermanos mayores? Responder estas interrogantes es muy importante para comprender tu propio estilo de ser madre. Necesitas estar consciente de los sentimientos que tienes frente a estos temas para que seas considerada a la hora de lidiar con tus hijos. Si fuiste la menor, ¿tus hermanos mayores te cuidaban bien? Si eres la mayor, ¿tuviste resentimientos cuando nació tu hermanito(a) menor? Entre más abierta seas contigo misma frente a estos temas, estarás mejor capacitada para lidiar con tus propios hijos.

 

 Algunas veces tu hijo puede no estar preparado para la llegada de un nuevo hermanito, debido a que no tiene la suficiente madurez intelectual para entender este novedoso acontecimiento en su vida. Por esto tu hijo puede llegar a sentir celos al ver que sus papás están prestando algún tipo de atención a otro bebé.

Después de que haya nacido tu nuevo bebé, tu otro hijo puede extrañarte a ti y a su papá y sentir que toda la atención está enfocada hacia su nuevo hermanito. Es por ello que tu hijo mayor puede desarrollar algunos comportamientos inusuales con el fin de llamar la atención tuya y de su padre.

No te extrañes si encuentras comportamientos poco comunes en tu hijo, tales como: portarse mal, olvidar decirte que necesitaba ir al baño o tener un ataque de rebeldía, entre otros, con el fin de llamar la atención. Para evitar estos comportamientos, la psicóloga Liliana De la Torre recomienda que durante el embarazo le hables a tu hijo sobre su nuevo hermanito.

Según la psicóloga de la Torre

quien actualmente es psicóloga de un colegio en el sur de Florida, para un niño mayor la llegada de un nuevo hermanito es un hecho muy complejo, y señala que “ si le hablas a tu hijo mayor sobre su nuevo hermanito y su venida, ayudarás a que el niño vaya aceptando la idea de compartir a sus padres con alguien más y cuando el nuevo bebé nazca, es probable que el hermano mayor llegue a sentirse orgulloso de su nuevo hermanito”.

Como ves, la llegada de un nuevo hermanito para tu hijo puede ser muy positiva. En el caso de María C. Oliveros, el consejo dado por la psicóloga de la Torre funcionó. María es mamá de dos niños, empezó a hablar con su hijo Camilo sobre su embarazo y a explicarle que después de cierto tiempo iba a haber alguien más en la familia. Al principio él no entendió mucho, pero al ver que su papá le hablaba al vientre de su madre y le decía que ahí estaba su nuevo hermanito, Camilo también empezó a hacer lo mismo y cuando lo hacía llamaba al nuevo bebé por su nombre, Sofía. “Todavía no sabíamos que el bebé iba a ser niña pero, efectivamente así fue”, dijo María.

Éstas son algunas sugerencias que la psicóloga Liliana de la Torre nos dio, para que puedas ayudar a tu hijo a asimilar la llegada de un nuevo hermanito:

 

·         Háblale sobre el nuevo bebé durante el embarazo.

·         Deja que tu hijo hable con el nuevo bebé que está en tu vientre.

·         Deja que tu hijo te visite en la clínica después del nacimiento.

·         Cuando le hagas un regalo a tu hijo mayor, no le digas que el regalo se lo hizo el recién nacido, ya que puede ser contraproducente si el niño está en edad de entender que el bebito no podría habérselo traído en realidad. Cuando el hermano mayor es grandecito, es mejor que sepa que el regalo se lo dan los padres, ya que así se reafirma que él es muy importante para papá y mamá.

·         Dedica un tiempo exclusivo para cada uno de tus hijos (mínimo de 15 minutos) en los cuales se incluya un poco de contacto físico, como abrazos, juegos, etc.

·         Pide a los abuelos de tu hijo mayor o a alguien más que lleven el niño al zoológico, al cine, a comer un helado, o a hacer algún tipo de actividad.

·         Cuéntale una historia a tu hijo mayor mientras le das alimentación materna a tu bebé recién nacido.

·         Deja que tu hijo mayor participe en las conversaciones referentes al tema del nuevo hermanito.

·         Desarrolla actividades que involucren a tu hijo mayor con el nuevo bebé, en las cuales tu hijo mayor tenga más contacto con su nuevo hermanito.

·         Préstale más atención de lo usual a tu hijo mayor para que no se sienta desplazado.


Lo más importante es que le hagas saber a tu hijo mayor que siempre habrá mucho amor para darle y que compartir con su nuevo hermanito es algo muy bueno

 

Las reacciones del primogénito ante el nacimiento de un nuevo hermano no depende tanto del sexo (aunque los niños se retraen más que las niñas) como de la edad en que se produce.

 

1.-Cuando hay mucha diferencia de edad, el mayor puede mimar excesivamente el niño y volverlo dependiente y malcriado. Evitemos cargar al niño con la responsabilidad del hermano menor.

 

2.-Cuando hay poca diferencia de edad, el mayor tiene entre 18 meses y 4 años, es cuando más se agudiza la sensibilidad ante el nacimiento de un nuevo hermano.

 

Las reacciones más frecuentes son cambios en el comportamiento y conductas infantiles:

 

Cambios en el comportamiento

 

-Incremento de la desobediencia

-Más llorones y tercos

-Irritables y nerviosos

-Agresividad creciente dirigida al principio contra la madre y posteriormente contra el hermano

-Retraimiento que desemboca en relación hostil con el hermano

-Afectuosidad excesiva hacia el bebé.

 

 

Conductas infantiles

 

-Se chupa el dedo

-Vuelve a hacerse pipi o caca encima

-Utiliza de nuevo el "lenguaje bebé"

-vuelven las rabietas

-Cambios en el sueño

-Se incrementa las conductas rituales

 

 

3.- ¿A qué niños les afecta más?

 

Va a depender además de la edad (en niños menores de 5 años se da más frecuentemente) de:

 

Relación con los padres antes del nacimiento del bebé:

Se ha comprobado que en las familias que el niño tiene una relación estrecha con el padre antes del nacimiento la escalada del conflicto con la madre tras el nacimiento del bebé es mucho menos marcada.

 

Estado de la madre tras el nacimiento del bebé:

Cuando la madre se encuentra cansada o deprimida tras el nacimiento del bebé, le lleva a cambiar su comportamiento y hábitos incluidos los que tenía con el niño, ante el cambio los primogénitos suelen reaccionar retrayéndose.

 

No podemos evitar los celos, sólo ayudar a que sean menos dolorosos y a no fomentarlos

 

 

LOS CELOS DEL MENOR HACIA LOS MAYORES

 

 

No solamente el primogénito siente celos, también los pequeños envidian a los mayores. El caso del niño de "en medio"" en una familia de tres hijos es el más difícil ya que puede sentir que no cuenta ni con las ventajas del mayor ni con las del pequeño.

 

Reacciones

 

El mayor le sirve al niño de modelo. Se identifica con él. Quiere hacer las mismas cosas e imitándolo va aprendiendo por si solo y desarrollándose rápidamente.

Esto que puede ser beneficios se convierte en perjudicial cuando la identificación y admiración es muy grande de forma que bloquea la personalidad del menor. Se puede colocar al mayor como un "tope" imposible de rebasar y entonces el pequeño:

 

-Se aferra a la madre y no quiere crecer: se chupa el dedo, se hace pipí, mantiene un lenguaje infantil..

 

-Se vuelve un rival agresivo e envidioso: esto es lo más frecuente, muchas veces se intenta toda la vida superar a los otros; esta agresividad envidiosa se manifiesta principalmente en TERQUEDAD como oposición sistemática.

lunes, 4 de marzo de 2013

ORIENTACIONES SOBRE LENGUAJE ORAL



ORIENTACIONES SOBRE EL DESARROLLO DEL LENGUAJE


 ·         A partir de los 18 meses de edad, el niño debe tomar la alimentación como el resto de la familia, no hecha puré, ya que masticando desarrolla la musculatura de la boca y por tanto mejora su lenguaje.

·         Realice con su hijo juegos de soplo: hinchar  globos, sorber con pajita, pitos, trompetas, soplar velas, imitar ruidos o sonidos producidos por animales...

·         Estimule el lenguaje de su hijo constantemente: háblele mucho, cuéntele cuentos, responda a sus preguntas, cántele canciones, escúchele con atención cuando habla....

·         "Háblele a su hijo pronunciando claro y bien, mirándole a la cara, ya que los niños aprenden a hablar imitando a los padre. Debemos procurar que nuestros hijos tengan un buen ""modelo"" en nosotros mismos."

·         Proporcione a su hijo oportunidades para expresarse.

·         Premiar al niño cuando hable bien, corregirlo cuando cometa errores, pero no criticarlo, ridiculizarlo o compararlo con otros niños o hermanos.

·         NO diga a su hijo, mientras habla, que se detenga y comience de nuevo.

·         NO le imite cuando hable mal, aunque le parezca gracioso.

·         "NO debemos responder en lugar del niño. Será mejor que cuando le preguntemos lo hagamos de tal forma que este no pueda responder solo un ""si"" o un ""no"", se hará por ejemplo la pregunta: ¿quieres una pera o una manzana? En lugar de ¿quieres una pera?”

·         NO tener una actitud sobreprotectora, sin ésta los niños podrán desarrollar mejor su aptitudes pues actuarán por si mismos.

·         NO recortar los finales de palabras.

·         NO gritarle, debemos hablar despacio y con claridad.

·         NO hay que hablarle con un lenguaje infantilizado. El niño utiliza este lenguaje infantil porque se encuentra en este estadio del proceso de adquisición del lenguaje y si lo imitamos estaremos frenando su proceso evolutivo.

·         NO debemos de regañarle ni de imitarle, sino solamente repetírsela correctamente.

·         Escuche lo que el niño le diga y respóndale adecuadamente.

·         Todos los días, elija un momento apropiado para la práctica y estímulo del habla, no regañe de continuo a su hijo.

·         Hacia los 4 años debe hablar correctamente como un adulto, aunque le serán difíciles las palabras que contengan r-rr-pr-br-pl-bl. Si a los 6 años continúan estas dificultades es el momento de consultar a un especialista.

·         Las muestras de cariño, de amor, de afecto ayudan a un mejor desarrollo del lenguaje de su hijo.

·         Si su hijo está frecuentemente distraído, repite constantemente ¿qué? Cuando habla en un tono excesivamente alto o bajo es aconsejable que no descartes un problema de audición (tapón de cerumen, hipoacusia...) para ello acudiremos a un especialista.

·         Vigile la voz del niño. Ocurre a veces que el pequeño fuerza su propio registro vocal, bien al, reproducir sonidos o ruidos que sean muy agudos, muy graves o muy intensos (al imitar ruidos de animales, ruidos de motores, etc.) o incluso los de sus propios

·         Todo cambio durable (de una o dos semanas) de la voz del niño pequeño, debería de ser objeto de consulta por parte del otorrino.

·         Evitar comparar al niño con otros. Dejar que se desarrolle a su ritmo, proporcionándole un ambiente verbal y articulatorio de calidad.

·         Evitar hablar al niño si tiene una fuente sonora próxima. Reducir los ruidos ambientales mientras se le hable, un fondo ruidoso dificulta la comprensión.

viernes, 22 de febrero de 2013

MUTISMO



ORIENTACIONES PARA VENCER EL MUTISMO ELECTIVO


Consideraciones

Algunos niños no se resisten a ir a la escuela, como los que sufren fobia escolar, pero aunque asisten a ella no se comunican verbalmente con los otros compañeros. El niño que tiene ese problema habla en casa, pero no lo hace con sus compañeros ni con los adultos de la escuela. Algunos se niegan a hablar durante muchos años, a pesar de lo cual parece que aprenden.

Los maestros informan que responden a textos impresos y, a veces, contestan “si” o “no” con un movimiento de cabeza o señalando con el dedo.

Aunque no se sabe porqué los niños manifiestan tal conducta, es imaginable que en principio el silencio se utiliza ya sea como mecanismo de defensa o de trato. Esos niños ven la escuela como algo aversivo y temible. Al no comunicarse, disminuye en cierto grado la angustia en la situación escolar. Sin embargo, aunque la ansiedad tiende a disminuir después de algunos meses en el colegio, la conducta persiste. Es posible que esto suceda porque maestros y alumnos suelen reforzar el silencio prestándole atención al niño. El silencio incita a muchas personas a ver si pueden inducir al niño a hablar, con lo cual le prestan más atención todavía. El refuerzo también puede estar en la evasión de responsabilidades escolares.


Orientaciones


Es difícil dar orientaciones válidas para todos los casos, especialmente en casuística tan compleja como la presente. Por ello recomendamos que se tomen con prudencia las recomendaciones que siguen puesto que quizá no sean del todo aplicables a todos los niños. Hay que entender que el mutismo electivo puede obedecer a multitud de causas, coincidentes en su mayoría en su aspecto afectivo, y que es un problema de la vida relacional e íntima del niño.

El profesor deberá juzgar si las características del niño permiten seguir las siguientes recomendaciones:

 ·         No presionar al niño/a de una forma directa a que hable. Es preferible provocar situaciones a lo sumo realizar intentos esporádicos ( dos o tres cada día ) de incitación, de forma tranquila e indiferente solicitando emisiones muy breves ( p.e.: si o no ).

·         Si el alumno no se comunica de ninguna manera es útil dejarle utilizar el lenguaje gestual. Posteriormente se habrá de trabajar para que lo suprima.

·         Si el alumno utiliza ya el lenguaje gestual, hacerse el desentendido y comunicarle que es imposible saber lo que quiere.


·         No exagerar los contactos afectivos, hacerlo de forma natural, ya que algunos de estos niños pueden temer el contactofísico o afectivo o sentirse mal al quedar como centro de la atención, al ser elogiado o acariciado de forma espectacular delante de sus compañeros.


·         Tener en cuenta las necesidades afectivas de estos niños.

·         Premiar cualquier intento de comunicación, por mínimo que este sea, desde un susurro a una mirada.

·         No hablar por el niño, ni dejar que ningún compañero lo haga por él.

·         Tratar al alumno normalmente responsabilizandolo de sus acciones como a cualquier otro. Es decir, no superprotegerlo. No prestarle más atención que a cualquier alumno de la clase.

·         No permitir burlas o desprecios por parte de sus compañeros.

 ·         Procurar que el ambiente escolar sea especialmente agradable.


·         No hacer comentarios que aludan al tema en presencia del niño.